Por Jair Villacrez
Antes de dar a conocer un libro, es importante definir una estrategia de lanzamiento, en la cual es necesario tener claro cuáles son los objetivos comerciales y los objetivos de comunicación.
Si bien esta estrategia puede ser elaborada por cualquier persona, es mejor encargársela a un especialista, por dos motivos: por su amplio conocimiento en el sector y por su visión externa de la realidad, pues ofrece un punto de vista objetivo.
En cualquier caso, ya sea que la estrategia sea definida por ti mismo o por otro (una agencia o un relacionista público), se debe tener en cuenta lo siguiente:
- El público objetivo (target) al cual va dirigido el libro: edad, sexo, poder adquisitivo, nivel sociocultural, etc.
- Intereses del público: gustos culturales, pasatiempos.
- Medios que utiliza el público al que te diriges: ¿medios tradicionales o medios digitales?
- Cómo quieres que perciban el libro que lanzarás: la reputación.
- Cuánto esperas vender.
Es necesario que haya coherencia entre los objetivos comerciales y los de comunicación, pues uno afectará decididamente al otro. Así, por ejemplo, si tu principal fin es vender, podrás hacer una estrategia de difusión masiva, para la cual tendrías que utilizar medios de mayor alcance, pero que podrían afectar la imagen de tu marca. Por el contrario, si te interesa posicionar un libro como un producto de calidad y bien elaborado, puede que ganes muy buena reputación, pero que no necesariamente signifique un gran volumen de venta.
No obstante, es posible también lograr un equilibrio entre ambos. Por ello, es recomendable contar con un profesional que pueda orientare sobre cómo llevar la estrategia de la mejor manera.